miércoles, 4 de octubre de 2017

EL KIOSCO DE LA JUANA.


Mi querida esposa, he conseguido una foto reciente del kiosco de la Señora Juana. 

Diferencia entre esta foto, tomada de Avilared, con la  limpia imagen que ofrecía, cuando su recóndito interior, era regentado por Juana.

Sin querer Mamá otorgarte cargo alguno, en tu celestial nube, te imagino cual receptora de toda nueva y buena alma que vuela al Cielo; hace unos días Juana, ayer Benedicta. Me imagino la franca sonrisa y el apretado abrazo.

El kiosco de Juana, está ubicado con estrategia militar, en el entorno del antiguo Cuartel del Gas, hoy luminoso centro escolar Claudio Sánchez Albornoz, popularmente apodado "La Aneja", por su función de ofrecer Prácticas a los futuros Maestros.

El Kiosco, lleva años cerrado sin ejercer su bonita función infantil de mercado: de compra y pago para nuestros pequeños; un aula infantil que los iniciaba en el dulce trueque de golosinas a lo que, pasados los años, exigiría el amargor de un préstamo o la consecución de una hipoteca.

O sea, el Kiosco de la Juana era un aula aneja a "La Aneja", donde la práctica de adquirir un "chuche", exigía empinar las punteras sobre la ventanilla, entregar las pesetas y recibir la vuelta. Todo un aula de Matemáticas para la Vida.

Pero lo bonito era la enseñanza del Aval. Mi niño, era esperado a la salida del "cole" por ti Mamá; cogidos ambos de la mano, caminabais hacia casa; el peque con su mochila al hombro y tú, mamá, con el carro de la compra hacia la Calle La Cruz Roja, hacia el anhelado kiosco de la Sra. Juana. 
-Qué quieres mi niño.
-Una piruleta, mama.

Desde el interior del kiosco la generosa Juana decía.
-Mi niño, te doy dos, una te la regalo yo
-Cómo se dice Alfonso
-Muchas gracias Señora Juana

En esta ocasión, Alfonsito había disfrutado del regalo de su Madre y el de Juana. Había obtenido un aval, no exigible, de ambas buenas mujeres.

Quien lo iba a decir Mamá, que un día, ambas: clienta y expendedora os abrazaseis de nuevo en esa nube estratégicamente situada, por la que todos pasaremos.

Tras Juana, ayer se presentó una nueva y guapa clienta. Benedicta.

Yo creo, que en el Cielo, han montado en estratégica esquina, un  kiosco como el de la Señora Juana.

Espero que un ángel tan generoso como Juana lo regente para cuando llegue mi Alfonso, hoy todo un  padrazo....y para cuando llegue este abuelete.

BUENAS NOCHES, MAMÁ.

https://www.youtube.com/watch?v=mPwcBxwHCEE