En la madrugada del día 12, Marte y su antagonista en luminosidad Antares, la estrella más brillante de la constelación Escorpio, se han colocado muy cerca de nuestra órbita terrestre.
Marte,venerado en Grecia como Ares, era el dios de la guerra, hijo de Júpiter y Juno (la Hera griega).
Antares (anti-Ares), es la rival rojiza de Marte, una super estrella que nos brida su luminosidad en Primavera y Verano, cuando al anochecer levantamos la vista al Firmamento.
Desde pequeñín, preguntaba donde vivían mis desaparecidos abuelos.....para un nieto la muerte de un ser tan querido no es comprensible. - Se han ido a la estrella, a esa que tanto brilla-.
Cada noche, en la calle Labradores de Valladolid, me asomaba a la balaustrada de nuestra galería, aquella que daba a un patio con gatos y gallinas, a esa hora del anochecer recogidas. Desde allí, con toda mi ternura les decía - Buenas noches abuelos-, y por un ratico, esperaba oír su voz, nunca conseguí percibir el dulce acento de mi abuela, ni el recio hablar de mi abuelo.
La familiar costumbre, se repite y hoy, es mi nieto, quien mirando al firmamento, desde que te fuiste, Justa, te da las buenas noches y le duele que enmudezcas. El fallecimiento de su abuelo Arsenio, le ha propiciado vuestra búsqueda en la doble luminosidad de Marte y Antarés.
Lo que no sé, es la estrella que ha buscado para la muerte de su perrita beige, no recuerdo su nombre. Aquella preciosidad de largas orejas, que jugueteando tras un conejo, fue objeto de un disparo traidor, dedo en el gatillo de un huido cazador malintencionado, suponemos quien es ,ya que al cruzarse con mi pequeño, baja la cabeza y enmudece.
Nos sirve de alivio localizar a nuestros seres queridos, aunque los supongamos lejos, muy lejos, imposibilitando su visión, solamente destellando en el silencio de la noche con la luminosidad de su amor y los rojos destellos de su candor. Así los figura la riqueza sembrada en nuestro corazón.
El acercamiento de Marte y Antares, confieso que -tontamente- me ha ilusionado. La idea de tener a mi Esposa -esa madrugada- más cerca, me alentaba.
Necesitaba esa proximidad, ya que la enorme lejanía de una nueva y encantadora amistad, propició un silencio: odioso, desleal. Rompí, por la distancia que nos separaba, con una encantadora amiga, que no precisaba amor y ofrecía el calor de la limpia y recta amistad.
Y aquí estoy, encerrado en mi jaula de oro, en la que muchos viudos picoteamos el diario alpiste, luchando mentalmente, por mantenernos vivos, medio vivos, dando cada día, un paso más hacia la senectud, hacia el torpe caminar, hacia el alzheimer, y a ser objeto de una obligación de la Sociedad.
La vida es la ruleta en la que apostamos todos. Mi bola recorrió ganadora contigo todos los números del amor y la compaña. Mi suerte se trocó, por primera vez me dio la espalda un 28 negro, en que te perdí para esta vida y quizás, para siempre.
Por ello, me ilusionó la cercanía de Marte y Antares, desde los barrotes dorados de mi jaula, la roja luz de Antares me envolvió , soñé contigo, por un momento creí tocarte, vivir contigo y morir como estoy, poco a poco, muriendo.
Esta noche si el firmamento nublado me lo permite, te buscaré en Antares, ya un poco más lejos, por recibir tu destello rojo, ese que me anime a seguir muriendo hasta que te alcance.
BUENAS NOCHES, MAMÁ.
https://www.youtube.com/watch?v=oUS5Fo6BgcY
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