Desconozco el celestial trazado de vuestra urbe en el otro mundo. Seguro estoy de que no contáis con un Callejón de Abrazamozas. Una pena. En este devenir de globalización, de unión, de superluna en comunicaciones, deberíais solicitar la apertura de tal Callejón dotándole de un tratado Schengen para la libre circulación de las personas, las almas de ahí y los entes humanos de aquí.
Sería una maravilla que este viudo pudiese llegar a vuestro callejón para poder abrazar a su garrida moza, pese a nuestros años, y -como no- darte un beso que supla la falta de ellos en estos siete meses. Dice el refrán Mujer besada, mujer ganada. Cuanto daría por ganarte, a mi lado, de nuevo.
Por estos bajos, los que si están en el Callejón, son nuestros políticos, la callejuela está a rebosar de personal, todos contentos, todos bailando, todos abrazándose. Van a dejar el Callejón echo una pena con tanta botella de cava por los suelos. Nadie ha perdido, unos logran la mayoría (menoría trocada en mayoría),otros ganan en escaños, los de allá ganan en votos, los de acá en programas a presentar... En este sorteo los décimos del Gordo están muy repartidos. Llegará el dinero para todos, hasta para saldar las deudas. No le llames trigo hasta que no esté en el silo.
-OTRA VEZ QUIERES, PUES TODOS LOS DÍAS QUIERES.
Un fuerte abrazo buena moza.
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